Un adjetivo en grado superlativo, también llamado comparativo de excelencia, expresa la característica en su grado máximo.[1] En las lenguas del mundo la gradación se aplica principalmente a adjetivos calificativos, pero puede darse también en adverbios, sustantivos, verbos e incluso preposiciones.
Superlativo en español
En español existen dos tipos básicos de superlativos:
- Superlativo absoluto: Un elemento posee una característica en su grado más alto, independientemente de otros elementos. El superlativo absoluto se expresa mediante adverbios que modifican al adjetivo, y mediante los sufijos -ísimo (buenísimo), -érrimo (paupérrimo) o los prefijos super- (supermercado); extra- (extradelgado), etc.
- Superlativo relativo: Un elemento de un grupo que se diferencia de los demás por poseer un mayor grado. Se construye con el adjetivo en grado comparativo de superioridad o en grado comparativo de inferioridad, precedido del artículo y seguido de un complemento encabezado por la preposición de.
Los superlativos absolutos pueden ser regulares o irregulares. En los superlativos regulares, el grado superlativo se forma añadiendo el sufijo -ísimo/-ísima a la raíz que presenta el adjetivo en grado positivo. Por ejemplo: clarísimo (claro) y rarísimo (raro). Los superlativos irregulares pueden tener forma propia. Al construirlos, se modifica sustancialmente la raíz del adjetivo. Por ejemplo: celebérrimo (célebre), ínfimo (inferior), máximo (mayor), mínimo (menor), óptimo (bueno), pésimo (malo).
Se suele considerar que ciertos adjetivos carecen de grado, ya que tienen siempre un significado equivalente a un superlativo (grado máximo de la cualidad), de modo que no es posible su gradación: colosal, diminuto, perfecto.
Superlativos absolutos irregulares
Véase también
- Comparación (gramática)
- Wikcionario tiene definiciones y pronunciación sobre muchos superlativos del español.
Enlaces externos
- Entrada en el DPD sobre los superlativos
Notas
Referencias


